domingo, 17 de marzo de 2013

Querido Nadie

Creo que las fuerzas del universo me odian.
Siendo egocéntrica y creyéndome el ombligo del mundo, empiezo a creer que algo muy malo he tenido que hacer en otra vida para que el Karma se cebe de esta forma conmigo.

Dos años enamorada a más no poder de una persona, del hombre que ha sentido a mi vida futura, del que quiero que sea el padre de mis hijos, la persona en la que pienso cuando alguien me pregunta: "¿Cómo ves tu vida dentro de 10 año?"
Tras tanto tiempo, siendo paciente, respetuosa y estando en segundo plano, incluso llegando a hacer de casamentera para él. He estado respetando y "queriendo" a su pareja, porque él es mi mejor amigo y lo que le hace feliz a él, me aporta felicidad a mí.

Y tiene que ser ahora, ahora que soy yo la que tiene a otra persona, ahora que consigo aparcar un poco esos sentimientos, que comienzo una nueva vida, nuevas expectativas y nuevo mundo. Ahora es cuando esa zorra decide darle la patada y dejarlo solo y desvalido, ponerme en bandeja la oportunidad que he estado deseando desde hace dos años, y precisamente ahora que ni tan siquiera quería que se me plantease tal opción, va y surge...

Hace escasamente un mes, tomé una decisión, y no pienso cambiarla sin más, pero soy consciente de lo que esta nueva situación implica. Aunque quiero a mi actual pareja, saber que él está ahí, y correr el riesgo de volver a perder la oportunidad me tienta, me atormenta, me debilita.

Cabreada con el universo se despide: Sin Remite.

viernes, 8 de marzo de 2013

Querido Nadie

Cual adolescente con mariposas en el estomago.
Escuchar música y creer que todas las canciones hablan de ti.

Hacía demasiado tiempo que no vivía esta situación
De hecho cabría decir que nunca se me había brindado tal oportunidad. Siempre solía enamorarme de quien no me amaba, o intentaba corresponder a quien se enamoraba de mi por no romperles el corazón y darme a mi misma la oportunidad de amar a alguien que ya me amaba primero.
Pero por primera vez el amor ha surgido como en una película típica de comedia romántica. Sin preverlo, sin esperarlo, simplemente poco a poco, con palabras contradictorias, con juegos, con tiras y aflojas. Haciendo que el  cariño naciese poco a poco, de forma constante y progresiva por ambas partes.

Llevas semanas soñando con un encuentro romántico y autoconvenciendome a mi misma para intentar reprimir y controlar mi lengua para no decir un "te quiero" inapropiado, precoz y repentino, para no agobiar y no asustar a la otra persona, y resultar que tras dicho encuentro idílico ese prematuro "te quiero" acaba brotando de sus labios.

Creer que todo es perfecto por un segundo, por momentos descubrirme buscando escusas para ver algo negativo, algún contra entre tantas ensoñaciones, y encontrarlo, pero luego suspirar y pensar: "pero es que me gusta tanto"

Cual colegiala enamoradiza se despide: Sin Remite.