domingo, 23 de febrero de 2014

Querido Nadie

Vuelve a pasar.
Vuelve la incertidumbre, el no saber que sentir, el no saber que pensar, el no creer a nada ni a nadie, la distorsión de realidad, no saber siquiera que ves ante el espejo.
Vuelve el silencio, las lagrimas reprimidas, los gritos ahogados, los sollozos ocultos en la almohada.


No hay cosa que odie más, y que a su vez más veces haya estado haciendo a lo largo de toda mi vida, que el hecho de reprimir un beso. Desear con todo mi cuerpo, mi alma, con todo mi ser, dar un beso, un simple, sencillo, único, suave y tierno beso, y que se quede en eso, en deseo, desear y desear, fantasear, soñar, anhelar un beso cual ambrosía universal, y no tener oportunidad de darlo, ni valor para propiciarlo.


Y vuelves tu, cambiando de nombre, de rostro, de cuerpo, de persona, pero otra vez tú.
"My Dear Mr. Nobody" me persigue constantemente, cual ente misterioso e incorpóreo que decide jugar a ocupar cuerpo al azar y entrometerse en mi vida para revolverlo todo, para crear o aumentar el caos que ya de por si hay en ella, volverme loca y no saber que quiero, que siento, perdiendo todo sentido de la realidad y enajenando por completo todo cuando creo conocer de mi misma.


Se que no es amor, ahora se que siempre usado mal ese termino, es más, empiezo a pensar que jamas he llegado a saber que es eso. O que cada tú dispar y distinto ha provocado que eso sea aleatorio y diferente y en si mismo haya sido y dejado de ser amor en partes iguales de forma realmente rápida y sin transiciones apreciables.


Odio esta situación de eterno movimiento interno con una coraza de quietud apabullante.
Odio no poder controlar esta situación, o no saber hacerlo, o que una parte de mi no quiera detenerlo, cuando se como comienza, cuando se como va a avanzar, cuando se que va a pasar, cuando se cual sera el final, cuando la historia se repite una y otra vez, cual pesadilla regresiva que tu subconsciente no puede detener y te acecha cada vez que vas a dormir.


Quisiera apagarlo, quisiera detenerte, quisiera poder descubrir tu verdadero ser, quisiera que te materializaras frente a mi sin poseer cuerpo ajeno alguno y pudiese darte una estocada mortal, para que esto parase, para que la historia dejara de ser cíclica, para que dejases de tomar las riendas de mis emociones y por una vez pudiese ser yo quien eligiese a mi siguiente "Querido No-nadie".


Me despido con el deseo de encontrar el botón de OFF en el corazón de este alma Sin Remite.


No hay comentarios:

Publicar un comentario