domingo, 26 de febrero de 2012

Querido Nadie

Hace un año comencé a compartir contigo el mejor año de mi vida.

Hace un año, pase 3 maravillosos días viviendo junto a ti, en tu mundo, me abriste una puerta que nunca podrá ser cerrada, porque me permitiste entrar en lo más profundo de ti. En ese momento, ambos confundimos ese recibimiento, los dos creímos que podría llegar a ser algo mas romántico e idílico. Pero en algo no nos equivocamos, esa entrada a ese nuevo mundo nos unió de por vida, nos aferro tanto el uno al otro que a ciencia cierta sabemos desde ese instante que pase lo que pase, estemos donde estemos, siempre nos tendremos el uno al otro. En ese instante se sello la amistad más profunda, sincera e irrompible que jamás hemos tenido ni llegaremos a tener con nadie más.

Creo que nunca olvidare aquella noche, ese restaurante mejicano, esos burritos de pollo, esa canción de cumpleaños feliz, ese baile de ese camarero y esa desconocida, esa sonrisa en tus labios, esa mirada ausente, esa servilleta sobre la mesa, esos minutos eternos en que me encerré en el baño. Esa noche, nuestra noche. La noche en la que descubrí que te amaba como jamás he amado ni amare a nadie, y que a su vez tú amabas a otra mujer como jamás has amado ni amaras a nadie.

Fue uno de esos momentos que en las pelis suelen reflejarse como una especie de alineación de planetas, un momento en el que se revelan todas las verdades absolutas y secretos de este universo. Pero que nadie se percata de lo que sucede.

Los dos sentimos como esa puerta se abrió, como nos adentramos juntos en un mundo nuevo, y ese lado sensiblero, moñas, y excesivamente romanticón que los dos tenemos, hizo que pensáramos automáticamente que algo especial pasaría entre nosotros, tarde o temprano. En ese momento no podíamos comprender hasta qué punto puede quererse a un amigo.

Es raro que sea yo quien diga todo esto, puesto que lo que siento por ti sé a ciencia cierta que es más que pura amistad, y que por mucho que me lo proponga nunca dejare de sentirlo. Pero cada día que pasa, cada vez que vienes, cada segundo que pasamos juntos me queda más claro que nuestra unión es superior a todo eso, que nunca va a haber un idilio, un romance, un matrimonio entre nosotros, porque estamos un escalón por encima de todo ello, y retroceder seria estropear lo que ya tenemos.

No podre olvidar la conversación que tuviste con tu madre el otro día en mi presencia:

- Es que ella es más buena que el pan.
- Entonces quieres decir que tu novia no es tan buena.
- No, hombre, mi novia es buena, pero no sé qué pasará, hoy tengo novia y mañana puedo no tenerla, o más adelante tener otra. Sé que a ella voy a tenerla siempre.

Te lo digo de corazón, es lo más bonito que jamás nadie ha dicho de mí, y sé que lo dijiste de verdad, no porque yo estuviese delante, se que lo dijiste porque lo sientes, porque lo piensas, lo tengo seguro porque yo también se que es cierto.

Así que sin lugar a dudas.

Siempre tuya: Sin Remite

No hay comentarios:

Publicar un comentario